Internacional

Corte Suprema autoriza a Biden acabar con el programa “Quédate en México”


La Corte Suprema de Estados Unidos autorizó este jueves al presidente, Joe Biden, a suprimir el polémico programa “Quédate en México”, una política migratoria instaurada por su antecesor, Donald Trump, que obliga a los solicitantes de asilo a esperar a que se resuelva su caso fuera del territorio estadounidense.

En su primer día en la Casa Blanca, Biden intentó acabar con este programa, pero un juez federal de Texas —uno de los nombrados por el republicano cuando era presidente— ordenó reinstaurarlo, lo que llevó a la administración demócrata a recurrir ante el Supremo, que ha fallado a su favor al considerar que la decisión de acabar con el programa no vulnera la ley.

Aunque en la práctica el solicitante de asilo podía esperar respuesta desde cualquier lugar fuera de EU, el programa pasó a ser conocido como “Quédate en México” por ser su frontera terrestre norte la llegada natural del flujo de inmigrantes. Tras el visto bueno del gobierno mexicano, miles de personas se vieron resignadas a esperar en campamentos insalubres, como los instalados en Tijuana y Matamoros. En el 99% de los casos, no hubo respuesta administrativa de Washington o fue negativa.

Pero la máxima instancia judicial estadounidense no evaluó la dureza de la política migratoria de Trump, conocida oficialmente como Protocolos de Protección a Migrantes (MPP, en inglés), sino la legalidad de la decisión de Biden de acabar con el programa.

Con cinco votos a favor y cuatro en contra, los jueces del Supremo consideraron que el memorándum emitido en octubre del año pasado por el gobierno de Biden para acabar con el “Quédate en México” no violó la ley federal de inmigración.

Como parte de su política de tolerancia cero hacia la migración, Trump instauró en 2019 los MPP, una política muy criticada por organizaciones de derechos humanos, que afectó a más de 60 mil solicitantes de asilo, la mayoría de los cuales quedaron varados en campamentos en la frontera mexicana.

El gobierno intentó rescindir esta política el año pasado, pero se enfrentó a la oposición de los fiscales generales de Texas y Missouri, que lograron que un juez federal del primer estado ordenara el restablecimiento del “”Quédate en México”, por lo que la nueva administración demócrata se vio obligada a negociar de nuevo con el gobierno de Andrés Manuel López Obrador que volviera a permitir que los solicitantes de asilo fuesen forzados a esperar en territorio mexicano.